En donde cantan las langostas y Harry Styles

A veces nos topamos con traducciones bien extrañas. Incluso aun no supero la traducción de esa película de 1975, “Atrapado sin salida” con Jack Nicholson. Me la vi hace poco, ya que me había visto Ratched, la precuela en Netflix, y quedé súper intrigado. Excelente, la película cuenta vivencias en un manicomio, con diálogos interesantísimos. Pero bueno, lo que les decía, el nombre original de esta película era “One flew over the Cuckoo’s nest”. ¿Porqué tan diferente el nombre original y la traducción en español?

Algo similar pasó el viernes. Me vi “La chica salvaje”, una excelente película que me quería ver hace rato, la tenía dentro de mis obligatorias, ya la habían puesto en cine, no había podido ir, y luego la vi como estreno en HBO. Es con Daisy Edgar-Jones, uno de los amores de mi vida cinéfila. A ella ya la había visto en una serie llamada “Normal People” y es absolutamente hermosa. Además esta película tenía bastantes menciones en festivales y demás. Está prohibido perdérsela.

Esta película es la adaptación al cine del libro “Where the crawdads sing”. La traducción es como “Donde cantan las langostas”. Los paisajes, que son una especie de pantanos o ensenadas, los diálogos, el devenir de la película, los dibujos que ella hace, todo es hermoso. Y la naturalidad con la que ella actúa es absolutamente imperdible. Lo único que les puedo decir respecto al título original es que donde cantan las langostas es un pequeño rincón cerca de su casa al que ella recurre cuando necesita alguna señal, cuando necesita sentimientos.

Hay de verdad varios giros inesperados, ya verán. Por otro lado, ya está disponible la tan esperada película de Harry Styles, quien ya pronto viene de concierto por aquí. Ya pronto, ya casi me voy a acampar a las afueras de la capital. La película se llama “Don’t worry darling”. Esta película también es inesperada y extraña, no más imaginen si…….

No, mejor no digo nada, estoy seguro que cualquier idea que plasme, cualquier divagación sobre lo irrelevante, atemporal e irreal de nuestra existencia los va a sesgar, así que no digo nada. Solo puedo decir que para ambas películas, déjense llevar, pónganse cómodos y denle play.

No sea que alguien le dé play por ustedes.

Infidelidades de Pandemia

Hay algo que la gente no supera: la cuarentena de 2020 motivada por el famoso covid. No más hace unos minutos vi un meme en el que recordaban el día fatídico cuando, de manera jocosa, un señor de China se come un murciélago. En las conferencias, en los artículos y en los informes siempre se habla, por ejemplo, de la producción pre-pandemia, que estamos en niveles pre-pandemia, que si comparamos cómo subió todo en la pandemia, incluso hace poco vi un flyer de una fiesta que celebraba volver a vernos luego del encierro de la pandemia.

La pandemia, todo es la pandemia. Para no ahondar en el tema y seguir adelante más bien, solo diré que el periodo marzo2020, y aproximadamente 18 meses después, fue una época maravillosa y de las más felices de mi vida. Añoro toda la época en su totalidad, era muy feliz. Sí que lo era. Algo que siempre admiraré es cómo en plenos meses seguían estrenando series, puntualmente recuerdo el estreno de la última temporada de Dark en junio de 2020. Qué tan importante habrá sido el covid, que ahora cuando a alguien le da hepatitis, dicen que le dio hepatitis; cuando a alguien le da gripa, dicen que le dio gripa; pero cuando a alguien le da covid, dicen con todas las ínfulas técnicas que “dio positivo para covid”.

Yo daba positivo para felicidad. Calles vacías, no interacción, mil cosas buenas. Hubo aspectos curiosos: por ejemplo en algunos días si tenía cédula par no podía entrar a una tienda, o si era hombre, si era mujer, entró aquí toda la discusión de géneros. Se desinfectaban llantas, tenía que firmar un registro para comprar un lapicero en Panamericana y se lavaban los bananos y los paquetes de papas con límpido, pedir una lasagna a domicilio era casi un sacrilegio.

El mayor avance tecnológico grupal en esa época fue la posibilidad de poner, durante las ahí sí obligadas reuniones virtuales de cumpleaños (no había cómo decir que no), un fondo en la plataforma Zoom que emulaba una playa, el centro de París o el Times Square de Nueva York. La creatividad al tope.

Pero lo más más impresionante de todo esto fue un servicio que vi la otra vez en un pequeño supermercado: como las salidas eran tan restringidas, ofrecían a los/las infieles el servicio de mercar, seleccionar, reunir y empacar la lista de mercado que se necesitara, todo en un tiempo determinado, esto con el objetivo de que la persona se echara su canita al aire, hiciera gala de su affaire media hora, una hora, diez minutos, recogiera el paquete (me refiero al del mercado) y llegara a tiempo a su casa nuevamente.

No sé cómo sería el slogan, probablemente “No te preocupes por tu paquete, nosotros nos encargamos”. No sé. O tal vez “Nosotros empacamos, tú encárgate de desempacar”.

Y bueno, dicen las estadísticas que en esa época hubo varios divorcios, otros tantos embarazos, peleas, reconciliaciones, pero lo que sí es un hecho es que los mercados para infieles aportaron su granito de arena.

10 noviembre – CRIPTOQUIEBRAS, CRIPTOMIEDO

Sonó todo alarmante ese título: criptoquiebras. Bueno, entonces no, quiebras no, espero que no. Ya no cabe más desconfianza y miedos en el mercado financiero, ya estamos bastante golpeados. Lo que sí es un hecho es que hay susto precisamente por problemas en un fondo gigante que opera los criptoactivos: el fondo se llama FTX y vamos con lo objetivo, con lo que sale en las noticias: dicen que este fondo valía hace dos días 15.600 millones de dólares, perdió el 94%, y terminó valiendo hoy 1.000. Dicen también que la razón de esto radica en los problemas en sus flujos de caja. Las noticias también dicen que Binance, otro operador gigante, lo iba a rescatar y luego dijo que no. Impresionante, ahora detengámonos un momento.

Pensemos en las proporciones: ¿cómo es posible que una entidad, fondo, institución, lo que sea, pierda 14.600 millones de dólares en un día? o en los días que sea, son 71 billones, o sea 71 millones de millones de pesos. Este es un clarísimo ejemplo de las perspectivas del mercado y cómo algo, de un día para otro, puede bajar todo lo que se quiera. Además, TODAS las quiebras se dan por problemas en el flujo de caja, ¿a qué se refiere esto? pues que supongamos que yo capto mil pesos de mis vecinos y esos mil los invierto en cosas raras, comprando maracuyás y bananos en el mercado negro. Resulta que perdí 200 de esos mil porque me fue mal, entonces ahora mis inversiones valen 800. Luego una vecina mía, una viejita cansona y chocha, doña Esther, me dice que oyó en las noticias que hay pesimismo y mil problemas entonces que por favor quiere retirar su plata; claramente yo no la tengo porque la invertí y además perdí. Me toca conseguirme la plata saliendo a una casa de empeño a vender mi reloj Tag Heuer, o algún anillo de oro, suponiendo que son míos. Con eso le cumplo a la viejita. Pero si esto es más grande y todos quieren salirse, pues ni modo, no tengo cómo responder y me toca declararme en bancarrota.

Espero todo mejore y no haya más problemas de confianza con el vapuleado mercado financiero. Hoy mejoró el bitcoin y vale 17.900 dólares, aunque sigue abajo. Otro cripto, el famoso Ethereum, también subió y vale 1.327 dólares. Ojalá todo sea un susto y ya, como cuando uno va caminando y siente un piquete. Seguimos pendientes, voy a echarle leche de almendras a mi café.

(por si acaso, la de la foto es mi vecina ficticia, doña Esther)

9 Noviembre – DOBLES VIDAS

Ando viendo esta película en MUBI y me ha gustado mucho, aun no la acabo: se llama “La doble vida de Verónica”, es de 1991, es franco-polaca y está excelente. Por otro lado, la actriz se llama Iréne Jacob, no la conocía, es hermosa. Se me hace raro no conocerla porque siempre me fijo mucho en eso, qué extraño. No sé qué vaya a pasar con la trama de la película, ya veremos, aunque francamente no me importa mucho; la gran mayoría de veces es igual de interesante el proceso que el resultado. Amo promediar películas recién hechas con peliculas menos nuevas.

Me he dado cuenta con el tiempo que hay dos tipos de películas: las ágiles, en las que uno tiene que saber el final ya y que son imposibles de dejar de ver; y las sosegadas, o sea las que uno contempla, estas son más tranquilas y no tienen esa premura. Ambas categorías son igual de válidas.

Mírenla y me cuentan.

Respecto a eso de la doble vida, diría yo que es difícil dictaminar cuál vida es más real: ¿la de mostrar o la de esconder? Ambas son igual de válidas, sino no existirían. ¿Será más interesante tener varias vidas aunque desleal con los demás, o solo mantener una sola vida, a costa de la lealtad con uno mismo, con lo que uno tal vez quisiera ser? ¿Qué opinarás tú, Iréne Jacob?

¿Qué opinan ustedes?

8 noviembre – Perder o Encontrarnos

Dicen por ahí que la mejor forma de encontrarse es perderse. ¿A qué se refiere esto? a que si uno se pierde, si se pone a divagar, si llega a la parte más septentrional y meridional de los sentimientos se logra el conocimiento, la revelación, precisamente en esos momentos extremos dice el aforismo que el alma se encuentra.

Yo agregaría también algo, precisamente lo contrario: la mejor forma de perderse es encontrarse. Y tal vez esta frase tenga más implicaciones que la primera, ya que precisamente el avanzar en ese conocimiento de sí mismo va creando grietas, rupturas, queda la carne pura, queda la mera esencia, lo más cercano a lo que en verdad somos. Y al conocernos, solo en ese momento de nuestro pleno conocimiento, podríamos decidir si lanzarnos a la perdición o a la salvación.

¿Sería trascendental lo anterior? Probablemente sí. Ya de hecho ni sé qué significaría exactamente la palabra Trascendental. Mejor continúo. Hace ya varios meses que no escribía y es extraño, siento que a medida que voy moviendo los dedos en el teclado se produce el mismo efecto de un corredor de carros que no manejaba hace rato y vuelve a meterse ahí: va moviendo las palancas, va acelerando un poquito, va emocionándose pero frena, frena otro poco, acelera otro tanto y ahí en ese tira y afloje de aceleración y desaceleración va produciendo algo. Va avanzando. Yo voy avanzando también. Probablemente ahora me devuelvo a corregir, seguro hay una palabra de más, seguro tiendo a repetir mucho.

Mientras tanto van varias cosas transitando en mi mente. ¿Qué tan fácil y plausible será retomar esto? Por ahora quedan aquí los registros, mientras culturalmente tengo a The White Lotus presente. Llevo unos cuantos capítulos y es una serie que me ha gustado mucho, tiene humor negro, es en Hawaii y se plasman traiciones y romances retorcidos. Así como en la vida real. Píllenla. Alexandra Daddario hace un papel muy bueno, ahí ella interpreta una esposa recién casada y evidentemente con unos conflictos internos y de pareja que deberá ir resolviendo. No más spóilers, vayan y véanla.

Luego vendrá la música y más referencias.