Un abrazo binario que vino del futuro

fuente:  https://frenchly.us/paris-zelda-and-fitzgeralds-way/

 

 

Empecemos recordando los activos determinantes de la realidad financiera, una realidad que se mide por lo general con números, gráficas e indicadores; algo que yo llamo materialismo numérico. Además estamos muy arreglados y fancy, muy vestidos y elegantes ahora, ya llegando luego del puente, ese fenómeno político y geográficamente establecido en el que se designa un día más como día libre, así que debemos repasar lo del viernes: el dólar quedó a 2.855,50 pesos y los Tes de julio de 2024, los más líquidos y famosos aún, cerraron al 6.14%.

 

El viernes pasado también ocurrió algo interesante: estaba sentado por ahí, muy sereno y solazado luego de almorzar pizza, aprendiendo sobre la secuencia Morse-Thue, una secuencia binaria bastante curiosa en la que se empieza con un 0 y un 1; luego los 0 se reemplazan por 01 y los 1 se reemplazan por 10. Con el tiempo todo se complica y aparentemente esa secuencia se repite en varios aspectos del arte, la música y el ajedrez. Locuras numéricas. Mientras hacía eso, se me acercó una niña bonita y me dijo que estaba haciendo un estudio (una tesis, no sé) y necesitaba ver cómo era el corazón de un hombre, así que me pidió un abrazo.

 

Debo confesar que al principio me generó desconfianza, pero lo hice, nos dimos un abrazo. Ella quedó contenta, agradecida y me regaló una chocolatina Jumbo Jet a cambio. No la volví a ver.

 

Tal vez era una matemática binaria que vino del pasado. Tal vez era Hipatia o Zelda Fitzgerald, tal vez era mi bisnieta del futuro. Son los milagros que producen las matemáticas.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.