(fuente: www.eltiempo.com)

Buenos días:

Hoy en Santa Marta estarán los directivos del Banco de la República lanzando billetes. Puede llegar a su mente inmediatamente la maquinita de concurso televisivo ochentero en la que el concursante se metía en una cápsula con pegante y por medio de propulsión de aire salían volando billetes y lo que pudiera agarrar le quedaba para su cuenta personal. Podrían imaginar la piscina de dinero así como la de Tío Rico y probablemente hayan ingresado a cotizar pasajes para ir y agarrar algo (algún billete, me refiero). No, no se emocionen: lo que ocurre es que lanzarán la nueva versión del billete de cincuenta mil pesos. Tengo entendido que es bien bonito y será más probable encontrarlo por ahí en supermercados, tiendas, charcuterías y hamburgueserías. La probabilidad es mayor que la de tener uno de cien mil. Este último todavía no lo he visto.

Otra semana en la que nos hacemos más viejos y en donde aparecen más canas en la cabellera cada vez más exigua y en la que ya, por los preceptos estéticos, no se vería presentable dejarse crecer las patillas a lo Oasis. Otra semana en la que los Tes subieron mucho de precio, o sea bajaron de tasa: el martes por ejemplo se transaban los julios de 2024 al 7.36% y hoy veo el 7.12%. Títulos también de mayo de 2022 que operaron el martes al 7.301% y hubo niveles del 7.095% ayer.  El dólar abrió hoy a 2.895 pesos, niveles bajos y tal vez algo impensables hace unos cuantos días.

Recuerden que una variable que habla del optimismo es el petróleo, un activo prominente y egregio usado para muchas cosas industriales y no industriales; este activo ha estado a 48.3 dólares. Hace una semana estaba a 43 dólares. Todo sigue y los olímpicos van acabando, viendo niñas muy tiernas y muy bonitas en el BMX. Resalto este arte de las bicicletas porque es lo que más me gusta, de hecho quiero una bicicleta de esas. Siempre quise ponerme un casco de esos, saltar andenes y picarla.

El mercado financiero sigue, con expectativas un poco más bajistas en la inflación y con un índice Colcap (el que agrupa algunas acciones colombianas) al alza, a 1.348 unidades (buen nivel).

Buena suerte y todo el optimismo siempre! Felicitaciones a todos los atletas, así suene a cliché todos, todos son ganadores, todos son hermosos!

(fuente: www.elespectador.com)

(fuente www.nacion.com)

La vida se compone de retazos, nada más cierto que eso. Hay retazos de pana, de chifón, de cuero y de seda; habrá otros negros, otros rosados y otros blancos; habrá también unos rugosos, otros peludos y otros lisos. Lisos y tersos como la piel de las mujeres y con textura de seda como lo auténtico y con clase.

Este artículo se escribe un miércoles en mitad de semana, con eventos de todo tipo. Dicen que uso mucho la palabra variopintos así que no la usaré, dado que mi intención es referirme a variados o diversos. Hay de todo y seguimos con los olímpicos, tema cuya mención explayada es innecesaria, para eso tenemos los noticieros, las incesantes transmisiones y los incesantes comentarios.

(un ejemplo de lo q pueden ver…… http://www.micloset.co/categoria/paulina/page/5/)

Empezaré hablándoles de algo que tiene clase y que tiene un bello propósito:

En la página http://www.micloset.co/categoria/paulina  pueden comprar la ropa que usó Paulina Vega, mujer y musa hermosa y elegante, cuando estuvo en Miss Universo hace dos años en 2014. Hay prendas muy bellas a muy buenos precios. Entren y verán, además con el dinero de estas ventas podemos recaudar para medicamentos para los niños enfermitos de cáncer de la Fundación María José.  Qué bonitas intenciones, qué lindo poderle ayudar a algún niño y qué mejor no solo dando dinero sino comprando algo bello. Anímense y me avisan, hay prendas a muy buenos precios.

Pasando a otros temas y habiendo hechos varios estudios de observación sociológica, entre muchas otras cosas he podido percatarme de algo. Primero que todo he de decir que podemos clasificar a la gente de acuerdo a algún tema en especial: por ejemplo si tomamos un tema como los vallenatos, podemos clasificar a la gente en dos, los que gustan del vallenato y los que no. Asimismo, si tomamos como agente clasificador el Facebook, podemos hacer una buena clasificación. En primer lugar, están los que interactúan; poquito o mucho pero interactúan. A veces ponen un “jajaja”, un like e incluso a veces lanzan disertaciones sobre los temas de actualidad. Este es el primer grupo. También está el segundo grupo: la gente que no tiene Facebook, entonces ellos no se meten y naturalmente no comentan.

Sin embargo, hay un tercer grupo que he podido identificar con microscopio en mi laboratorio de observación social. Son los muchachos o muchachas que son usuarios de Facebook, fisgones habituales que se meten y se enteran que tal niña tuvo bebé, que tal otra peladita terminó con Juanito y se cuadró con Manuel de Los Ángeles, se enteran que su traga del colegio ahora vive en España pero que, por cosas inexplicables, nunca comentan ni interactúan de ninguna forma.

(fuente: www.informatica-hoy.com.ar)

Naturalmente debido a esto no tienen la ignominiosa fama de desocupados. Por lo general esta categoría poblacional dice que el Facebook es una perdedera de tiempo y que tiene un valor económico inflado, pero siempre se meten a ver los videos (puesto que ya es un segundo YouTube) del man que se cae en la bicicleta o de la dama de compañía que se resbala en un matrimonio. Son los más enterados de los demás.

Esta misma categoría se aplica a los que dejan doble chulo sin contestar en el Whatsapp o que no contestan mails. Yo creo que a esta categoría pertenecen cada vez más personas; naturalmente, qué perdedera de tiempo las redes sociales.

Esta categoría se meterá hoy a ver las fotos de la ropa de Paulina Vega pero nunca me lo dirán.

Buena suerte!

 (qué delicia, amo Republik…….en.wikipedia.org)

Terminamos esta semana con un panorama bueno en el dólar y en la percepción de riesgo que ve la gente de afuera. Lo que les digo lo argumento mostrándoles un dólar que cerró ayer jueves a 2.891 pesos, muy por debajo de lo vivido la semana pasada; y cuando les hablo de la percepción de riesgo he de mencionarles un producto llamado CDS (credit default swap). Este producto se puede interpretar como un seguro que pagan los inversionistas ante un posible incumplimiento del país. Entonces entre más paguen por ese seguro es porque están viendo más riesgo. Por el contrario, si los precios de estos seguros bajan es porque la percepción de que quebrará el país disminuye. Pues bien, estos días los precios de esos CDS (no confundir con Compact Discs, coetáneos de la generación X) han bajado, así que nos ven con mejores ojos en las otras plazas. También hay un petróleo recuperándose por los lados de 43,49 dólares; así que si bien tenemos inflaciones gigantescas y mucha gente importante hablando sobre si se subirán más las tasas o, más bien, si sí son efectivas esas subidas para contener la inflación (hasta dónde sean efectivas no lo sabemos), si bien tenemos todas las pasiones en contra y a veces creyéramos que estamos en el abismo, pues podemos siempre aferrarnos a los datos positivos y esperar. Todos decidimos a qué dato aferrarnos y si tenemos como opción los buenos y optimistas, pues sigamos adelante. La vida tiene reveses, es normal, pero de esos reveses se debe salir.

(súper súper tiernas….fuente: www.elsalvador.com)

En el mercado de los bonos colombianos siempre ocurre algo. Vemos títulos que en su vencimiento de julio de 2024 rentan al 7.383%, una tasa que contrasta con los que se subastaron el martes: este día hubo títulos a un año al 7.70%. Es curioso, nada más lo menciono, que un título de largo plazo rente menos que uno de corto plazo. Esto viene pasando ya hace varios meses pero seguramente a alguien no tan inmiscuido en el quehacer financiero le provocará una curiosa, prominente y picaresca enarcada de ceja. Hubo un banco, Corpbanca, que emitió bonos esta semana al igual que el gobierno, quien también emitió títulos de tasa fija el miércoles pasado. Todo esto ocurre mientras demuelen barrios tristes y peligrosos en la capital, barrios donde se gestaban atrocidades inimaginables. Ese pasado debe quedar ahí, borrado, en el cielo, en donde sea, pero debe quedar refundido y a la espera que la maldad no resucite en otros lares.

(fuente: www.15a20.com.mx)

Semana de polémicas por cartillas educativas, de pork chops en Republik, de libros de Henry James empezados, de selfies o “autofotos” entre atletas de Coreas del Norte y del Sur (las orientales me parecen divinas, debo decirlo), de lágrimas de alegría por pesistas fortachones colombianos, de boxeo, de Judo. Muchos deportes en segmentos televisivos preasignados, monstruos en el tenis de mesa y sirenas en las piscinas. Impresionante todo. Para estar acorde con las tendencias gastronómicas y procedimentales de la vida, anuncio formalmente que lo que están leyendo es una columna artesanal y orgánica. Hecha con mis propias manos y con mi propio corazón.

Buen fin de semana!!

He descubierto un inmenso gusto hacia la siguiente interacción: Ver una película a todo volumen, habiéndola previamente escogido con mis criterios establecidos, gozarla, emocionarme, si es el caso devolverme para revivir algún diálogo pero, más importante que todo esto, estar pendiente del soundtrack. Para realizar esta labor de seguimiento bien podría meterme a internet y buscarla y ya, pero luce más interesante estar con el celular listo y engatillado, con el shazam, para de una saber qué es lo que suena.

(qué hermosura Copenhagen….fuente: www.filmaffinity.com)

También por otro lado es importante grabar la escena en la que la música y los diálogos llenan el alma para, acto seguido, compartirlo vía whatsapp, snapchat o una aplicación que conocí hace poco llamada “Musical.ly”.  No hablemos de instagram, twitter ni facebook, aquí ellas no aplican, aquí ellas no existen. Las escenas con buena música son para snapchat o para los contactos de whatsapp que, dado el conocimiento previo de ellos,  podrían disfrutar. Si es algo de trance, uno ya sabe a quién enviarle; si es algo de baladas francesas de los años setenta, ya tengo el destinatario, y así sucesivamente. La labor de ver la película, shazamear y compartir, todo este conjunto, constituye la dinámica, en su máximo esplendor, del melómano cinéfilo versión 2016.

 (esto es de Begin again…fuente: singersroom.com)

Hace poco veía Copenhagen, una bella película de 2014. Independientemente de la trama, del final, de la relación entre los dos protagonistas, de lo bellos que son y de las locaciones urbanas de esta ciudad danesa, hubo una escena en la que están en la discoteca de moda. Alto. Hay que detenerse, hay que poner Pausa. Es un techno asfixiante, delirante y delicioso, un techno que les comparto a continuación: “Northern Structures” de Self Similarity. Luego, un par de minutos después, suena “State violence state control” de Arnaud Rebotini. Qué delicia, qué buen plan ahí, en una discoteca de Copenhagen.

Mientras veía otra película, Begin Again, también pude detectar unas cuantas canciones interpretadas por su misma protagonista Keira Knightley. “Lost stars” es muy bonita. Me parece que Keira cuadra para películas históricas y en esta, si bien es actual y muy estadounidense,  también pasa. Lo que no me cuadra nunca es su risa: ella es bonita (digamos que normal y planamente bonita) mientras está seria, pero cuando se ríe todo se daña. Eso pasa con muchas, con demasiadas mujeres.

(ella es Phoebe Ryan, recomendadísima…fuente: www.josepvinaixa.com)

Siguiendo con las travesías musicales conocí “Mine” de Phoebe Ryan, de la película How To be Single. Y de la película If I stay, sobre una niña que muere, oí “Halo” de Ane Brun. Gran canción, gran momento atmosférico acompañado de todo este tema de la muerte, de ver el túnel y de salvarse.

Lo interesante es que en la búsqueda precisamente salen nuevas cosas. Shazam es el mejor asesor y YouTube es la mejor discoteca. En el momento en que buscamos por ahí en las redes sociales vemos recomendaciones, vamos abriendo puertas, todas ellas voluntarias, todas ellas con la voluntad de aprender más, de gozar más. Algo compartimos, algo nos guardamos, cada quien verá si hace caso  o no.

Todo esto que percibo ayuda a sobrellevar y a hacerle contrapeso a los dogmas y a las solemnidades, también ayuda a sobrellevar las otras películas de acción que no dejan nada, esas de rápidos, de furiosos y de Tarantinos con tonalidades de rock and roll poco agradables.

Sí, ando con mi Shazam como quien busca Pokemones. Yo busco canciones, belleza y sensaciones.