La objetividad es importante. Es necesario a veces, a manera de cultura general, tener los datos frescos e irrefutables sobre lo ocurrido ayer. Sepamos que los martes se subastan títulos de corto plazo, cortando al 4.539% los de vencimiento 12 de marzo de 2019. Sepámoslo, así como también debemos saber que el apetito comprador se mantuvo en los títulos de renta fija, con dinámicas extraordinarias como esta: los títulos de agosto de 2026 abrieron al 6.311%, llegaron a bajar hasta el 6.236% y terminaron cerrando al 6.261%. Sepamos que ese movimiento es importante, de hecho hace una semana estos títulos estaban mucho más arriba; así son las cosas, ahora hay mucha demanda y tendremos TRM para hoy de 2.767,82.

Entre simultáneas activas y pasivas va el mercado, entre movimientos, dinámicas, velas, pérdidas y utilidades. Pero bueno, lo importante es que vamos bien, de hecho leí por ahí que Fitch ratings espera un incremento de nuestro PIB de 2.6% en 2018 y 3.5% en 2019. Es el poder de una declaración.

La objetividad es importante, digamos que casi siempre. Todo lo anterior nos sirve y mucho. Pero de ahí en adelante debemos mezclarle algo de subjetividad, algo de futuro, algo de pasado y algo de autonomía. Es poner un emoji y una decisión trascendida en todo esto, es hacer guiños. Toda esa mezcla es lo que denominamos humanidad.