Antes que nada, para empezar bien la semana y con algo refrescante, quiero compartirles algo que escribí para El Nuevo Liberal, el periódico de mi ciudad natal Popayán: http://elnuevoliberal.com/las-mandarinas-simbioticas/ . Habla sobre algo de simbiosis que pude sentir hace pocos días, cuando estuve dándome una vuelta por ahí. Les invito a que lo lean cuando gusten, mis queridos lectores.

También nos vamos enfrentando a una nueva semana en la que hay, como siempre, nuevos retos, oportunidades, obstáculos y vivencias, donde siempre contamos con la capacidad de decidir. Somos nuestras decisiones, para bien o para mal, eso lo tengo muy claro, lo tengo insertado en las configuraciones de mi disco duro. Hay algo de datos y es que los Tes de julio de 2024 cerraron al 6.82%, con algo de estrés alcista, mientras los mayos de 2022 iban al 6.68% y una tasa muy importante se configuraba al 6.81%. ¿quieren saber a cuál me refiero? A la DTF.

Para algunos puede sonar casi a educación primaria o preescolar pero no. La DTF es una tasa que, para que lo sepan, nace del promedio de todas las tasas de los CDTs de las instituciones financieras a exactamente 90 días. Así que podemos decir que, en promedio, los CDTs en Colombia la semana pasada estuvieron al 6.81% a 90 días. Siempre se usa de referencia para otras tasas compuestas y, bueno, hace parte del imaginario ancestral humano llamado cultura general.

(él es Montesquieu….)

Por ahí leí una frase de Charles de Montesquieu que me encantó: “Nunca tuve una tristeza que una hora de lectura no haya logrado disipar”. A eso le agregaría música, le agregaría aire.