17 de Diciembre – Malentendido en Moscú e inundaciones en el Sen

Buenos días:
Antes de empezar, debo empaparlos con una canción de Esteman con Carla Morrison, llamada “Adelante”. Sin palabras, qué belleza, esa es el telón de fondo. Ahora sí empiezo. La lluvia ha impregnado de agua a la capital y a otras regiones del país. Asimismo esa agua, manifestada en aguaceros, charcos y goteras también permeó los rincones del mercado financiero, tanto de tasa fija como de acciones y de monedas. Empecemos con el dólar: para sintonizarnos con la realidad, este activo usado por los exportadores, por los importadores y por el niño Dios, abrió a 2.454 y cerró a 2.428, llegando a un máximo de 2.466 y a un mínimo de 2.417; bastante volatilidad con altura. Hubo 154k en acciones, 151k en futuros específicos y simultáneas por 1.8bn entre el 0% y el 4.65%, un rango bastante amplio. En cuanto a los Tes, ahí podemos decir que hubo aguas lluvias y aguas sucias, por decir lo menos. Lo ilustraré con tres ejemplos: los jun16s se subieron del 4.94 al 5.04, los sept19s del 5.85 al 6.01 y los jul24s del 7.18 al 7.32. Un clima feo con bastantes inundaciones en las pantallas. A las 2:30pm los jul24s operaron al 7.225% en el mec. Frente a esto hay poco qué decir. 
Resulta que en Rusia, país de León Tolstói, gran escritor que nos permeó de sentimiento con la historia de Anna Karenina y Vronksy en la que ella termina suicidándose al no poder seguir con toda la ignominia de parte de la sociedad, ahí en ese país subieron las tasas de referencia (las que aquí son del 4.5%) del 10.5% al 17%. Si la subida de los jul24s deja poco que decir, la subida de estas tasas así de sopetón pues nos deja más mudos. Se hace aquí un minuto de silencio. Proseguimos. Esta decisión rusa se dio junto con una producción industrial que bajó 0.4% y con una clara influencia del petróleo, cada vez más bajo. La moneda de allá, el rublo, abrió a 62.47 (rublos por dólar) y cerró a 67.91; sin embargo, lo curioso es que tocó el 79.17, dejando lo que los expertos y seguidores de Kiyosaki llamarían una cola de techo, fenómeno gráfico de velas japonesas que se da cuando en un periodo determinado sube mucho y luego se devuelve. Bastante álgido el movimiento, mientras los Tesoros en EEUU bajaron del 2.1148 al 2.0591 frente a, entre otras cosas, datos malos de su economía (menores construcciones iniciales y dato negativo en Viviendas nuevas).
Así como en el temperamento y en el comportamiento uno tiene una porción estable y una porción volátil, en las posiciones ocurre lo mismo. Mientras veía a la modelo del momento Edita Vilkeviciute mirándome y lanzándome piropos, me acordaba de una gran novela de una de mis favoritas, la francesa Simone de Beauvoir. La novela se llama Malentendido en Moscú; narra la historia de una pareja de más o menos 65 años que va a visitar a la hija del señor allá a Moscú. Entre matrioskas y vodka transcurre el aburrimiento, un aburrimiento que casi raya con el divorcio; al final todo termina en un malentendido. Qué bonita novela y qué nostálgica. Ahora ocurre esto, ocurre esa subida de tasas y todo este revolcón. No sé qué ocurra luego, tal vez Putin diga que todo fue un malentendido, y guarde sus matrioskas ya rotas, primero la pequeñita, luego la más grande y así sucesivamente. Malentendido en Moscú.
Buena suerte para hoy!!
Jorge Alonso Ruiz Morales
trader moneda legal 
Corficolombiana
tel 3279925
twitter @kemistry09

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